En noviembre del año pasado, Emerson Omar Díaz López, de 45 años y actual directivo de la Empresa Municipal de Agua (EMPAGUA), fue denunciado ante el Ministerio Público (MP) por supuestamente haber violado de forma continua a una niña, quien tenía ocho años cuando comenzaron los hechos que narra. Hasta la fecha, el proceso en su contra ha avanzado a paso lento, debido a una serie de retrasos propiciados por su defensora, la actual magistrada de la Corte de Constitucionalidad (CC), Claudia Paniagua.

Kimberly López / laCuerda

Una noche de noviembre de 2020, Andrea* se acercó a su mamá y le confesó que desde hacía tres años, Omar Díaz López, su padrastro, abusaba de ella, tocaba su cuerpo y la amenazaba para que no le contara nada a nadie.

“Mami, ¿por qué le hacen eso a las niñas?”, había preguntado Andrea un tiempo atrás, cuando una joven conocida fue secuestrada y sus captores amenazaron con exponerla a violaciones. El caso fue un punto de inflexión para la niña, le permitió comprender que lo que su padrastro disfrazaba como “amor de padre”, era un abuso y debía contárselo a su mamá.

Según relató, durante más de dos años, Andrea guardó silencio porque Díaz López amenazaba con retirar el apoyo económico que brindaba para el tratamiento de su hermana, quien se encuentra en estado delicado de salud. También le mentía diciendo que los abusos eran propios de un “amor de padre”. Sin embargo, su comportamiento indicaba que algo andaba mal. Andrea se hacía daño constantemente, se arrancaba el pelo, lloraba con frecuencia y bajó su rendimiento en el colegio. Incluso, intentó quitarse la vida ingiriendo cloro.

“Me contó que Omar la besaba, la tocaba y la desnudaba cuando todos dormíamos, él abusaba de ella”, relata la madre, quien de inmediato confió en las palabras de su hija y salió de la casa que compartía con el acusado. Hoy Omar Díaz enfrenta una denuncia por violación agravada y Andrea intenta recuperarse de los abusos continuos que vivió.

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Una magistrada defensora

Díaz  fue denunciado en noviembre de 2020, en la Fiscalía de la Mujer ubicada en el municipio de Antigua Guatemala. Desde el inicio del proceso, la magistrada Claudia Elizabeth Paniagua Pérez ha figurado como su abogada defensora. Paniagua Pérez actualmente es magistrada suplente de la CC. Además, fue defensora de Diego Ariel Stella, empresario argentino denunciado por violación, en la Antigua Guatemala.

Omar Díaz ocupa el cargo de Director de Diseño y Construcción en Empagua desde el año pasado. Según el portal de contrataciones, desde 2018 a la fecha ha prestado servicios profesionales para la Municipalidad de Guatemala.

Aunque el Ministerio Público solicitó que Díaz fuera ligado a proceso por violación con agravación de la pena, la jueza Lidia Rubí Pérez decidió vincularlo por agresión sexual con agravación de la pena, un delito que establece menos años de prisión. La misma jueza decidió otorgarle arresto domiciliario, prohibición de salir del país, prohibición de acercarse a Andrea y su familia y una caución económica de Q15 mil.

En las declaraciones que ha dado, Díaz niega haber cometido abuso sexual. “Cuando lo confronté me dijo que llevara a la nena y que ella lo acusara frente a frente, por supuesto que no lo hice porque eso sería exponerla”, relata la madre.

Pese a que según el dictamen emitido por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala (INACIF), el testimonio de la niña demostró ser consistente y que su narración es congruente con los daños que manifiesta en su estado psicológico, Díaz y su defensa mantienen su postura de negar los supuestos hechos.

“El agresor declaró que la niña era quien lo espiaba mientras él se bañaba”, relató la madre de Andrea.

Tras los exámenes físicos realizados a Andrea, el INACIF no pudo detectar lesiones físicas pero sí señaló coherencia en el relato de la niña. La ausencia de daños en su cuerpo ha sido el argumento de Paniagua para insistir en que su defendido no debe ser juzgado por violación.

Una serie de retrasos y más revictimización para Andrea

El lunes 6 de septiembre, debía llevarse a cabo una audiencia en el Juzgado de Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente en Antigua Guatemala, con la intención de solicitar modificar el delito por el cual fue ligado a proceso.

“Él quedó ligado por un delito distinto al que ella denunció, ella denunció violación. Tenían una audiencia para modificar el delito a violación pero la abogada Paniagua se excusó diciendo que estaba enferma, entonces la audiencia se suspendió. Queda otra vez en suspenso lo que vaya a suceder”, según el equipo legal.

El caso lleva prácticamente un año sin que exista un mayor avance, debido a constantes objeciones señaladas por la abogada Paniagua, que ha retrasado el avance de las audiencias.

En ese proceso, Andrea ha sufrido varios momentos de revictimización.

“La abogada que lo defiende ha atrasado todos los procesos como ella ha podido. Ella recusó a una jueza, dijo que había defectos en los procesos e hizo llegar a la nena como cuatro veces para que diera su declaración”, cuenta la madre de la niña.

Cada vez que Andrea debe contar lo que sucedió, siente miedo.

“Lo que ocurrió le hizo mucho daño a ella y la están re victimizando porque tiene que recordar lo que le pasa cada vez que la hacen venir y en una ocasión se lo dijimos a una jueza (Shirley Figueroa), pero ella dijo que no era revictimizar porque no lo está viendo (al acusado)”, agrega la madre.

En otra ocasión, luego de brindar su declaración, Paniagua interrogó a Andrea. “Le preguntó: ¿Por qué espiabas a Omar en el baño?”.

La respuesta del sistema de justicia

Andrea y su familia se sienten defraudadas y poco respaldadas por el sistema de justicia. Desde el año pasado, cuando se presentó la denuncia, hasta la fecha, Andrea ha sido revictimizada y se ha tenido que exponer a situaciones que la perturban.

“Yo solo sé que este sistema es corrupto, se pagan muchos favores. Lo peor de todo es que las víctimas están expuestas. El mismo sistema le pone trampas a uno. Yo no sé si las autoridades me van a resolver, todos están comprados”, lamenta la madre de Andrea, quien a pesar de su decepción asegura que continuará procurando el caso de su hija hasta alcanzar justicia.

El próximo 4 de octubre la defensa de Andrea solicitará que Omar Díaz sea ligado por violación, no por agresión. La niña asegura que de poder dirigirse a las y los jueces les diría que hagan justicia por la niñez que vive ese tipo de agresiones.

“Ella me dice: Mami, yo no quiero que ninguna niña sufra más lo que sufrí”, relata la madre, sin poder evitar que su voz se quiebre. Después de un respiro, concluye: “Yo no hago todo esto por venganza, lo hago por justicia”.