En sus redes sociales Hescarleth Membreño se nombra a sí misma como una chica de pueblo. Ella, desde la ruralidad, enseña educación sexual integral y conversa sobre las situaciones que a diario vivimos miles de mujeres. Actualmente su cuenta en Tik Tok la siguen más de 114 mil personas. Ella aprovecha la plataforma para orientar a las y los adolescentes que tienen dudas con respecto a su cuerpo.

Francelia Solano/ La Cuerda

“A veces es difícil creer las cosas que pasan en el pueblo”, dice Hescarleth Membreño, una tiktoker guatemalteca originaria de San Miguel, Flores, Petén. Desde el norte del país facilita educación sexual y habla sobre los mitos y creencias con las que le ha tocado crecer.

Costumbres y tradiciones que marcan

Entre las cosas que la gente no suele creer, es que aún existe la costumbre del “intercambio” de niñas por un “costal de maíz, una vaca, un terreno o por dinero”, señala Membreño. Comenta que esto aún sucede en comunidades no tan alejadas del área central de Petén.

Uno de los casos que más le impactó fue el de un chico que siempre asistía a las charlas y luego desapareció repentinamente. Membreño preguntó por él y la respuesta la dejó impactada. Le dijeron que él ya no llegaba porque estaba “pagando a la patoja”.

Con esto se referían a que el chico tuvo que ir a trabajar por seis meses con el papá de ella para que se la “dieran”. Una adolescente de 15 años, a cambio de trabajo. “Lamentablemente dan a las niñas al señor que tenga más dinero”, comenta.

En sus videos, Hescarleth también narra experiencias personales.

Cuenta, por ejemplo, que su bisabuela, una mujer q’eqchi’, “creía que se les debía destripar el pecho a las niñas para que no se les cayera cuando dieran de mamar. Esa práctica se la hicieron a muchas mujeres de mi familia. Yo lo conté en Tik Tok porque es real, me quedaron los pechos muy pequeños, como si fuera una niña de 11 o 12 años”.

Cuando ella compartió su historia otras mujeres comentaron que también era una tradición que se practicaba en sus familias. Hablar, señala, es importante para evidenciar los problemas que muchas mujeres viven en común sin darse cuenta.

Las dudas constantes de la juventud

Según Iliana Tzin, de la Asociación de Mujeres de Petén Ixquik, para acceder a educación sexual integral en dicho departamento hay solamente tres formas. La primera es en las escuelas, pero suele ser una muy mala información porque los maestros prefieren saltarse el tema; la segunda es en los puestos de salud, que son escasos en la ruralidad; y la última es Tan Uxil, la organización en la que participa Membreño.

A través de la asociación las y los jóvenes reciben información científica y laica. Debido a que el formato suele ser bastante formal, Membreño comenzó a hacer videos en Tik Tok para hacer el tema más ameno y llegar a más personas. El éxito ha sido evidente, tanto que suele generar confianza y se acercan a ella para hacerle llegar dudas.

La pregunta más recurrente en los hombres, según comenta, es cuánto mide un pene normalmente. Cree que mucho tiene que ver con que los adolescentes usan la pornografía como referencia. Por otro lado las mujeres tienen preocupaciones más complejas como el embarazo o las consecuencias del sexo sin protección.

Entre las dudas que más la han sorprendido es la del sexo infantil consensuado. “Un chico me dijo que él tenía 14 años y su novia 13 y si podían tener relaciones sexuales”, recuerda Membreño. Ella respondió que estaban en su derecho sin embargo no era recomendable y que si decidían hacerlo tenían que tener informarse más.

Después se dio cuenta que esa era una pregunta bastante frecuente. “Es preocupante que ya sean muchísimos niños que comenten eso todos los días. Algo está pasando porque cada vez se sexualiza más a la niñez”, señala.

Según Membreño, los monitoreos de Tan Uxil en el área muestran que la actividad sexual entre la juventud del área inicia entre los 12 y 13 años y regularmente comienza sin información.

Decirse feminista

Llamarse feminista en la plataforma es una de las cosas que más genera controversia. Cuando lo dice suele perder seguidores y las críticas le llueven. “Estoy muy contenta porque tengo muchas seguidoras feministas y cuando alguien me ataca son ellas quienes me defienden”, asegura.

Otro problema bastante frecuente para las feministas en la plataforma digital es que les eliminen las cuentas. Uno de los casos es el de Estibaliz Feito, una feminista mexicana que tenía casi medio millón de seguidores cuando Tik Tok decidió cerrarle la cuenta. Aunque Membreño no ha pasado por este problema sí ha sido censurada por la plataforma.

Por ejemplo, le prohibieron hacer videos en vivo durante una semana por enseñar a colocar un condón en un palo de madera. “Es decepcionante”, asegura, pues en la plataforma hay contenido explícito o de mujeres sexualizadas que no se penaliza. Ella no se da por vencida y dice que continuará hablando con las y los jóvenes a través de su cuenta.

Tiktok.