Un país donde juezas y jueces crean en los testimonios de las niñas sobrevivientes de violencia sexual sería el sueño hecho realidad de Lidni Osorio de 13 años, una de las niñas que protestaban por justicia. Mientras tanto, dentro del Juzgado de Antigua Guatemala, continuaba el proceso contra Omar Díaz López, acusado de abusar sexualmente de Andrea*, una niña de 11 años.

Kimberly López / laCuerda

«No te vamos a dejar sola», era el mensaje que repetían Lidni y otras niñas que viajaron desde Chimaltenango para hacerle saber a Andrea que no está sola y que muchas otras también claman por justicia.

A las 14 horas, del lunes 4 de octubre, en el juzgado de Antigua Guatemala, la jueza Melida Vásquez de Orellana debía determinar si Omar Díaz López sería juzgado por violación sexual contra una niña de 11 años. Sin embargo, la audiencia contra el director de Empagua, fue reprogramada para el 18 de octubre a las 11 horas.

La razón fue que el acusado no se presentó al lugar porque supuestamente resultó ser positivo a Covid-19. La abogada Luzmila Barrientos, quien se presentó como defensora del acusado, entregó como evidencia del estado de salud de Díaz López dos documentos: un certificado de un laboratorio y un informe de la clínica médica de Empagua.

Mientras esto ocurría dentro del juzgado, afuera un grupo de niñas repetía una consigna: #LasNiñasSoloQueremosJugar.

«El país de mis sueños es uno donde se haga justicia, donde cuando una niña denuncie un caso se haga algo por ella y que le pongan importancia porque la niñez es primero», dijo Lidni.

Lidni y sus compañeras pertenecen a la asociación Coincidir, una organización ubicada en Chimaltenango. Lidni continuó: «Quiero que ella (Andrea) sepa que todas estamos con ella».

Jessica, de 9 años, también explicó su visión: «Me gustaría un país donde hagamos justicia contra los que abusan. En este momento buscan niñas para robarlas y nosotros queremos que ya no roben niñas».

Según Jessica, su país no es un lugar seguro para jugar en las calles. Y tampoco es seguro dentro de sus casas, a juzgar por lo que le sucedió a Andrea.

La magistrada deja el caso

Al iniciar la audiencia, se dio a conocer que la magistrada Claudia Paniagua decidió abandonar el caso como abogada defensora. En una nota publicada por laCuerda, se expuso cómo Paniagua litigaba de forma sospechosa para retrasar el caso contra Díaz López.

A partir de ahora, la magistrada no continuará con la defensa y el nombre de la persona que la sustituirá está en suspenso.

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Además, las abogadas defensoras de Andrea solicitaron que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) verifique la veracidad de las pruebas de Covid-19 presentadas por el acusado.

En 24 horas, el INACIF deberá constatar el diagnóstico de Omar Díaz. De lo contrario, se analizará su rebeldía en el proceso, según ordenó la jueza Vásquez.

Al final de la jornada, Lidni y sus amigas enviaron un mensaje a Andrea, a quien no conocen pero respaldan en su búsqueda de justicia.