Según los monitoreos de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH), el hospital regional de Sololá ocupa el cuarto lugar a nivel nacional por su tasa de contagios de Covid-19 entre las personas trabajadoras. En las últimas semanas, el 12 por ciento del personal administrativo y de salud ha dado positivo y, según las y los afectados, la principal razón es la falta de medidas administrativas para prevenir contagios.

Kimberly López /laCuerda

De las 416 personas que laboran en el Hospital de Sololá, 49 han resultado positivas de Covid-19 en las últimas semanas. Los contagios, según narran algunas, se dieron en efecto dominó debido a la falta de controles de prevención y de equipo de bioseguridad para todo el personal.

“Cuando alguien sale positivo le ponen tantos peros para mandarlo a resguardo y luego no mandan a cuarentena a quienes han tenido contacto con esta persona. Es un riesgo para todos”, dice uno de los trabajadores, quien prefiere omitir su nombre por temor a represalias por parte de las autoridades del hospital.

Según denuncias anónimas del personal del hospital, ante la situación y la ola de contagios, la directora Sheily Laparra se ha mostrado indiferente. A eso se suman otras dificultades como la falta de contratación de profesionales, el atraso en pagos, las malas instalaciones y la falta de equipo e insumos.

Por esas razones, integrantes del sindicato del hospital solicitaron en varias ocasiones la remoción de la directora. “Es claro que no tiene conocimiento de un protocolo de seguridad para resguardar a los trabajadores”, aseguran.

Los hallazgos de la PDH

La PDH se percató de este problema y otras anomalías, en una visita realizada el 23 de septiembre. En el informe, la Defensoría de la Salud consignó que en el hospital no existían suficientes medidas implementadas para prevenir estos contagios. Tampoco hay protocolos adecuados para el uso de equipo de protección.

Zulma Calderón, Defensora de la Salud de la PDH, estuvo en el lugar y pudo verificar las irregularidades que señalan integrantes del personal.

Personal de salud en el área COVID-19 del Hospital de Sololá.
Foto: PDH

En el lugar existe un comité de farmacoterapia, el cual se encarga de dar los lineamientos para la compra de equipo de protección del personal. Sin embargo, ese comité no está legitimado, no tiene representación de todas las especialidades del hospital y no está integrado por ninguna persona del área Covid-19.

No existe un adecuado sistema para los uniformes hospitalarios, explica la defensora.

“El personal lleva los uniformes a su casa, no los dejan en el hospital y al final eso se convierte en un gran riesgo. Lo ideal sería que en el hospital se encargara del lavado de uniformes para tener un mejor control”, asegura.

laCuerda documentó hace algunas semanas que la infraestructura del hospital ha sido un problema latente. El área de duchas, baños y vestidores es ejemplo de ello pues no cuenta con el aislamiento necesario para resguardar a médicos o enfermeros.

Tampoco existe un sistema de vigilancia apegado a controles epidemiológicos para monitorear los casos positivos. Calderón ve con preocupación que no existan lineamientos para que al personal se le realice hisopados de forma periódica. Los llevan a cabo únicamente cuando presentan algún síntoma.

Ante esta situación, el temor de los trabajadores ha ido en aumento. “Hay personal que tiene toda la razón del mundo, están con mucho temor y psicosis porque una persona del hospital falleció”, explica la defensora.

Entre sus recomendaciones a las autoridades del hospital, la Procuraduría sugirió adquirir suficiente equipo de protección en apego a los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

También solicitaron establecer protocolos de vigilancia y control para el personal. Es decir, tomar medidas para reducir la propagación de contagios. “A cada persona que sale positiva hay que hacerle un estudio para identificar en dónde fue que se contagió y quiénes más pudieron estar en riesgo”, explica Calderón.

Directora del Hospital: “Ellos no cumplen los protocolos”

Ante las recomendaciones emitidas por la PDH y las denuncias del personal afectado, la directora Sheily Laparra Ordoñez sostiene que sí existen protocolos adecuados en el hospital. Pero que no han sido cumplidos a cabalidad por las y los trabajadores.

“Lamentablemente el personal de laboratorio no cumplió con los protocolos. Un familiar de un trabajador dio positivo, comieron juntos y eso no está permitido. Ellos pusieron en riesgo la vida de todos al no cumplir con los protocolos”, respondió Laparra, vía mensaje de texto.

Según Laparra, solamente aquellas personas que obtienen un diagnóstico positivo pueden resguardar cuarentena en su casa. Para quienes han tenido contacto con alguna de ellas, no es necesario.

Para la defensora Calderón, la falta de medidas y de equipo suficiente para el personal ha sido determinante para la difusión de casos positivos. En consecuencia, está expuesta la salud de todo el personal, pero también la de las y los pacientes que asisten a ese centro hospitalario.

Es un riesgo de dos vías, están en riesgo pacientes, personal de salud y sus familiares. Calderón señala que la situación evidencia la falta de empatía de parte de las autoridades administrativas y del Ministerio de Salud Pública.

Visitantes durante el protocolo de desinfección previo al ingreso al hospital.
Foto: PDH

Lo peor de todo, añade Calderón, es que no es el único hospital con ese problema. La gran mayoría de centros hospitalarios públicos enfrentan una situación similar.